Vivimos en un planeta precioso en constante movimiento. Que a su vez crea la vida tal y como la conocemos.
Es bien sabido que cuando la tierra muestra su poder, nos damos cuenta de lo insignificantes que somos ante ella. Decimos que somos la civilización. El ser mas evolucionado del reino animal. Si animal, a veces nos comportamos como tal. Sobre todo y ante todo cuando resurge nuestro instinto mas primario. El de la Supervivencia.
Cuando entramos en este estado, tenemos dos opciones. O luchar y sobrevivir. O rendirnos y perecer. Tenemos libre elección. Sin embargo, es un principio tan primario, tan heredado a través del tiempo, que nos hace en ocasiones comportarnos de tal manera que no nos sentimos orgullosos de nosotros mismos. Es cuando aparece una emoción que hace que te mantengas inmerso en el agujero de oscuridad que tú mismo te has introducido. Una emoción que te arrastra y sobre todo te hace sentir un victimismo que llega a anularte e incluso a querer desaparecer. Esa emoción es la Culpa. Te culpas por todo, por lo que has conseguido y lo que no. Por lo que podrías haber hecho y por circunstancias, no te has atrevido a realizar. Esa culpa atormenta tu Alma, apaga tu Ser.
Es fácil caer en un sinfín de emociones que nos hacen alejarnos de lo que en realidad hemos venido a hacer.
Todo movimiento genera un cambio que en ocasiones provoca la desestructuración de todo lo ya conocido. Ello implica una alteración interna, un reajuste a la realidad presente.
Sin embargo, después de la tormenta, llega la calma. Este dicho popular que la propia naturaleza nos brinda, es lo que se produce en nuestro interior.
Y es en la calma, donde llega la claridad, donde permites que resurja tu Poder, cual barco emerge a flote después de una larga tormenta. Es en este instante de serenidad y de calma donde has de restaurar tu barco. Donde has de reorientarte al rumbo correcto, para poder llegar a ese puerto soñado.
El tiempo ahora va a tu favor, sin embargo, no sabes cuánto va a durar. Son en esos momentos de quietud, donde has de aprovechar al máximo y centrarte en tu Poder. Ya que es ahí donde yace la realización plena y alcanzar todos los objetivos que llegan a ti.
En ocasiones uno puede sentir miedo de su propio Poder. Sientes tal fuerza en tu interior que te hace temer escoger el camino inadecuado. Mas es en el camino donde te vas reforzando, afianzando y alcanzando paso a paso todo cuanto te propones.
Muestra tu Poder y haz que el Mundo sea un poco mejor.
Con Ayuda todo es más Fácil.